RODOLFO LLÓPIZ CISNEROS (La Habana, Cuba, 1966).
“Juntos pero no revueltos S/T I + Juntos pero no revueltos S/T III”, 2005.
Fotografía, ejemplar 98/99.
Firmada y numerada en la parte trasera.
Medidas: 70 x 50 cm.
En la obra de Rodolfo Llópiz la investigación pictórica y fotográfica se transforma en un apasionado montaje de iconos y signos familiares. Sus trabajos son una mezcla de imágenes en las que combina conceptos considerados contrarios o distintos: lo informal con lo formal, el texto con la imagen y el color con el negro.
Rodolfo Llópiz se formó en la Academia de Arte San Alejandro, la escuela de arte más antigua de Latinoamérica, para después formarse en pintura y grabado. En el año 89 entró a trabajar en el taller de serigrafía de René Portocarrero, que se convirtió en el centro cultural de Cuba en los años 90 y por donde pasaron importantes artistas como Martín Chirino. Allí realizó una carpeta de serigrafías homenaje a Tino Casal. En enero del año 96 la Asociación Cultural Arci Nova lo invitó a Italia, junto con otros cinco pintores cubanos, para realizar la exposición itinerante Ver para creer. Tiempo después consiguió una beca para realizar una carpeta de grabado en Weimar (Alemania). En esa época colaboró con la galería RAM en Zúrich y la galería Canvas en Ámsterdam. Posteriormente viajó a España, donde reside a día de hoy.