Relicario de ventana; siglo XVIII.
Plata en su color, vidrio pintado con temple y papel.
Presenta buen estado de conservación.
Medidas: 9,5 x 6 x 1,5 cm.
Relicario de ventana con estampa de la coronación de la Virgen en la zona frontal y santa mártir pintada sobre cristal al dorso. La pieza que puede ser utilizada como colgante posee una estructura realizada en plata que sirve como base y marco de las dos imágenes devocionales que componen el diseño del relicario. El trabajo de platería alcanza un gran valor ornamental que queda patente en la delicada filigrana que envuelve el perímetro del marco ovalado y en los detalles calados que se suceden rítmicamente en la zona exterior del marco. Estos ornamentos tridimensionales representan elementos vegetales sintetizados trabajados en detalle en la parte delantera. La zona trasera concebida a modo de medallón muestra la imagen, pintada en temple, de una santa que en actitud piadosa sostiene un crucifijo.
Este tipo de relicarios fueron muy habituales desde el periodo gótico, empleados para contener reliquias de los santos. Es preciso recordar, sin embargo, que entonces se consideraba como reliquia sagrada a prácticamente cualquier elemento que hubiera estado en contacto con el santo o con sus restos mortales (paños, tierra de la sepultura, etc.). Los mejores ejemplos se realizaron en metales preciosos.