JORDI CANO CUNILL (Vic, 1950).
“Memoria descriptiva de piscina”, 1992.
Díptico.
Óleo sobre madera y papel.
Presenta etiqueta de la galería Salvador Riera al dorso.
Medidas: 54 x 38 x 6 cm. (cada uno).
La obra de Jordi Cano navegó en los años noventa entre la abstracción y una peculiar figuración de carácter sintético, tanto en la forma como en el uso del color, cercano, en ocasiones, al informalismo. En este sentido, su pintura también se interesa por la serendipia, el garabato, el trazo informal que revela la corporeidad del artista y el azar.
Jordi Cano Cunill entró desde muy joven en contacto con la vanguardia artística catalana, interesándose desde el principio tanto por las artes plásticas como por el teatro y la poesía, y vinculándose a diversos grupos de poesía. En 1979 entró en contacto con el grupo teatral Els Joglars, colaborando en diversos montajes. Ha participado en diversas exposiciones individuales y colectivas en Vic, Ripoll, Granada, Cuenca o La Coruña.