Vaso íbero; siglos IV-I a.C.
Cerámica trabajada a torno. Cocción oxidante y pintada.
En muy buen estado de conservación. Se ha sometido a un proceso de limpieza y consolidación.
Medidas: 22,5 cm.
Recipiente cerámico cerrado de cuerpo cilíndrico que se estrecha ligeramente hacia la base, cuello ligeramente estrangulado con borde exvasado y labio engrosado y redondeado. Presenta decoración pintada en colores rojo-vinoso y anaranjado, con motivos de bandas horizontales de diferentes anchuras. Las formas de las primeras cerámicas ibéricas se hicieron imitando a las fenicias y griegas de importación, pero posteriormente los iberos desarrollaron formas autóctonas. Entre este variado repertorio de recipientes, uno de los más abundantes, y el más característico por su forma genuinamente indígena, es el cálato (del griego Kalathos), denominado comúnmente “sombrero de copa”. El cálato se utilizó habitualmente como recipiente para almacenar productos como la miel, frutos secos o el garum, pero también estaba destinado a fines religiosos y rituales, como se deduce de algunos de sus temas decorativos de contenido simbólico y de las inscripciones que exhiben algunos ejemplares, así como de su presencia en los cementerios como urna cineraria.