Cabinet oriental del siglo XVIII.
En madera lacada con incrustaciones de nácar.
Ricas bisagras de latón calado y grabado.
Base de madera tallada, calada y dorada.
Presenta algunas faltas.
Medidas: 86 x 100 x 86 cm.
Excepcional cabinet oriental, una obra que entabla un fructífero diálogo estético entre el Lejano Oriente y la Europa rococó.
El cuerpo principal del mueble es un testimonio del virtuosismo de los maestros ebanistas y lacadores orientales. Sobre el fondo oscuro de la madera lacada, se despliega una delicada narrativa visual. La escena muestra un paisaje lacustre de ensueño, poblado por figuras con los rostros de nácara que parecen suspendidas en el tiempo. Una pagoda se alza con elegancia arquitectónica, mientras una embarcación surca las aguas tranquilas, evocando la poesía y la serenidad del arte asiático. Taracea y marquetería combinan tonos y materiales, para hacer destacar los jinetes y la arquitectura sobre el fondo boscoso.
La estructura se articula mediante dos hojas, con una imponente cerradura central y un juego de bisagras de latón calado y finamente grabado. Estos elementos metálicos, además de su función práctica, realzan la suntuosidad del conjunto.
Al abrir sus puertas, el cabinet revela diez cajones de distintos tamaños, cada uno adornado con sutiles ramas de nácar. Cada gaveta está fileteada en metal, lo que contribuye a configurar un orden armónico. La delicadeza del detalle y la maestría del trabajo artesanal en el exterior repercute también en el interior.
La base de madera tallada, calada y dorada encarna, en cambio, el espíritu Rococó europeo. Sus formas sinuosas y orgánicas se entrelazan en una exuberante composición de follaje y rocalla. Entre la profusión de motivos foliados, destacan los dos putti que adornan el saliente del faldón.
Este cabinet es un símbolo perdurable de artesanía refinada y de la erudición de una época que supo encontrar la armonía en la fusión de mundos distantes.