Pareja de ángeles torcheros; siglo XVII.
Madera tallada y policromada.
Presentan faltas y restauraciones.
Medidas: 86 x 43 x 30 cm (x2).
Pareja de tallas en madera de medio bulto, policromadas y doradas, representando a dos figuras masculinas que probablemente portaban en su origen lámparas o cornucopias con luces. Se trata de dos ángeles ataviados con túnica, manto y botas, con la cabeza descubierta, en posiciones complejas y escorzadas, que nos hablan del dominio formal y técnico de su autor. Se trata de dos figuras de acusada expresividad, dinámicas y teatrales en sus gestos, típicamente barrocas. Otra característica propia de este estilo es el acusado volumen de los pliegues de las telas, que produciría expresivos claroscuros a la luz de las velas.
La escultura barroca española es uno de los ejemplos más auténticos y personales de nuestro arte, porque su concepción y su forma de expresión surgieron del pueblo y de los sentimientos más hondos que en él anidaban. Quebrantada la economía del Estado, en decadencia la nobleza y cargado de fuertes gravámenes el alto clero, fueron los monasterios, las parroquias y las cofradías de clérigos y seglares los que impulsaron su desarrollo, siendo costeadas las obras en ocasiones mediante suscripción popular. La escultura se vio así abocada a plasmar los ideales imperantes en estos ambientes, que no eran otros que los religiosos, en un momento en el que la doctrina contrarreformista exigía al arte un lenguaje realista para que el fiel comprendiera y se identificara con lo representado, y una expresión dotada de un intenso contenido emocional para incrementar el fervor y la devoción del pueblo.