Escuela catalana o aragonesa, siglo XVI.
Cabeza masculina.
Alabastro policromado.
Presenta desperfectos y faltas.
Medidas: 9 x 9 x 10 cm.
Escultura fragmentaria tallada en alabastro. Cabeza de personaje barbado tocado con un gorro. Destaca la calidad de la talla, apreciable en el trabajo de los mechones de cabello que han sido elaborados en hondas incisiones, cincelados uno a uno. Asimismos, la expresión del rostro es naturalista. Los párpados ligeramente caídos, las cejas arqueadas y las suaves arrugas componen una expresión cargada de sentimiento. Probablemente representa un personaje religioso.
En Cataluña y Aragón, la escultura renacentista recibió la influencia del Quatrocento italiano, en cuanto idealización de las figuras e interés por la anatomía. Pero, por la persistencia del gótico catalán, el movimiento renacentista se desarrolló dentro de unos criterios locales propios y únicos.