Icono ruso del siglo XIX.
“La protección de la Madre de Dios” o “La Virgen de Pokrov”.
Tempera sobre tabla. Plata
Cuenta con un marco de plata, siglo XIX.
Medidas: 31 x 27 cm.
“La Virgen de Pokrov” es una de las iconografías propias de la iglesia ortodoxa rusa, aunque describe eventos sucedidos en Constantinopla hacia el año 910.
A priori el relato fue cogido de la biografía de Andrés de Constantinopla, que junto con su discípulo Epifanio, vieron a la Madre de Dios volando sobre la Iglesia de Santa María de las Blanquernas, cubriendo a los creyentes con su omofório, en símbolo de la protección. En varias ocasiones el relato fue modificado, siendo la última la versión del obispo Demetrio de Rostov, compuesta hacia los finales del siglo XVII, y que contaba que entre los que vieron el milagro estaba el Juan Bautista, Juan el Apóstol, Andrés de Constantinopla, y el rey León el Sabio. Es precisamente la iconografía del icono del interés. El significado de este milagro, es que la Madre de Dios protegió la ciudad de Constantinopla contra la invasión musulmana.
El prototipo del icono de la protección de la Madre de Dios, o, en ruso, La Madre de Dios de Pokrov, se desarrolla hacia el s.XIV, aunque tomará más repercusión en las centurias posteriores. Hay dos tipologías principales de la representación de esta escena. Una, la más antigua, pertenece a la escuela de Novgorod. Otra, la que tenemos enfrente de nosotros, fue desarrollada en la escuela de Rostov y Suzdal, y fue finalmente implementada en la escuela de Moscú. Esta última tipología se distingue por la Madre de Dios representada en el registro central, delante de la iglesia. El omofório, lo sujeta en sus dos manos, en vez de ser sujetado por los dos ángeles, como sería representado por los pintores de Novgorod. Aparte de los apóstoles, diferentes mártires, y Andrés de Constantinopla, en el registro central inferior, justo debajo de la Virgen, se presenta un personaje propio de la escuela de Rostov, Romano el Méloda, el autor de varias canciones dedicadas a la Virgen María. Cabe destacar que a la derecha de Romano el Méloda, vemos a San Alejo de Roma, o San Alejo mendigo, y la mártir Anisia de Salónica.
La composición del icono subasta, es muy peculiar, pues rompe con la tradición iconográfica de representar a la Virgen en el centro compositivo de la imagen, construyendo asimismo un patrón simétrico entre los personajes. En este caso, la composición está dividida en dos registro horizontales, que no tienen vinculo compositivo entre sí. Y el centro de la atención de la escena superior, la principal y la más importante, está desplazado hacia la esquina izquierda, en la que se encuentra el Pantocrátor. Todos los personajes, incluyendo la Virgen sosteniendo el mofório está girado en tres cuartos hacia la aparición del Dios. De este modo, el protagonista iconográfico cambia completamente, y en vez de serlo anteriormente la Virgen, ahora lo es Jesucristo.
Este tipo de composiciones es muy poco común. El icono del interés sigue de forma casi idéntica, la composición de uno de los iconos más representativos de la Protección de la Madre de Dios con esta composición modifica. Se refiere al icono ubicado en la archifamosa Catedral de San Basilio, ubicada en la Plaza Roja de Moscú.
El icono cuenta con un marco antiguo de plata repujada, decorada con motivos naturales y florales.