Miniatura francesa de finales del siglo XVIII.
“Retrato de dama”.
Guache sobre vitela
Medidas: 6 cm (diámetro); 7,7 cm (diámetro marco).
Una joven de alta clase social posa deliberadamente para el pintor. Gira su cuerpo en una actitud dinámica mientras esboza una media sonrisa. Su cabello se recoge en un pasador de perlas, las mismas que se repiten en el collar. El encaje de su vestido y el carácter aterciopelado del mismo nos habla de la riqueza de la joven.
La pintura de miniaturas, especialmente de retratos, se desarrolló en Europa a partir del siglo XVI. Se trataba principalmente de pinturas encajadas en objetos como medallones, relojes de sobremesa o pequeñas cajitas. Se realizaban en una gran variedad de técnicas, como el óleo sobre cobre, estaño o marfil, las aguadas sobre pergamino o cartulina y, desde el siglo XVIII, la acuarela sobre marfil. Este delicado arte se irá perdiendo desde la segunda mitad del siglo XIX, en paralelo al desarrollo de la fotografía.