MICHAEL WAGMÜLLER para Villeroy & Boch, finales siglo XIX.
“Joven llevando a su hermana a hombros”.
Gres patinado.
Firmada y fechada: “Wagmüller, 1871”.
Presenta sellos de manufactura: “Villeroy & Boch Merzig an der Saar, Germany Saarland”.
Presenta desgastes por haber estado al exterior.
Presenta algunas pérdidas.
Medidas: 125 x 42 x 58 cm; 96 x 52 x 53 cm. (peana).
Michael Wagmüller (1839–1881) fue un escultor alemán que asistió a la Escuela de Artes y Oficios de Múnich, donde dio sus primeros pasos en el arte bajo la tutela del escultor Anselm Sickinger (1807–1873). A partir de 1860 comenzó a trabajar de manera independiente, aunque con escaso éxito inicial. Debido a la falta de encargos escultóricos, se dedicó temporalmente a la pintura de retratos, hasta que recibió una comisión para realizar dos bustos y dos figuras alegóricas femeninas para una escuela en Múnich.
Entre 1868 y 1873, Wagmüller viajó regularmente a Londres, donde esculpió una docena de bustos de miembros de la nobleza británica. Estas obras fueron expuestas en Múnich, donde llamaron la atención del rey Luis II de Baviera. El monarca le encargó entonces una estatua de bronce de Luis XIV de Francia, el “Rey Sol”. En 1869, sus obras presentadas en el “Glaspalast” de Múnich le valieron una medalla de oro honorífica.
En 1872, se tiene constancia de que creó un modelo de una niña cargando a su pequeño hermanito a cuestas, que presentó, entre otros lugares, en la Exposición Universal de Viena. Esta obra, seguramente, fuera la que nos ocupa.
En la Exposición Universal de París de 1876 presentó un emotivo monumento funerario dedicado a sus dos hijas fallecidas en la infancia. La obra recibió elogios de la crítica y acabaría convirtiéndose en su propio sepulcro. Durante sus últimos años, Wagmüller trabajó casi exclusivamente en encargos para los palacios de “Linderhof” y “Herrenchiemsee” del rey Luis II.