Círculo de JUAN DE ANCHIETA (Azpeitia, Guipúzcoa, c. 1540 – Pamplona, 1588); segunda mitad del siglo XVI.
“Cristo resucitado”.
Madera tallada y policromada.
Presenta restauraciones.
Medidas: 50,5 x 75 x 10 cm.
En este relieve en madera tallada y policromada se representa la resurrección de Cristo. En la obra figura una decoración habitual en este tipo de escenas litúrgicas: la representación de Cristo Resucitado, que con mano la izquierda señala al cielo dorado y con la derecha bendice a los apóstoles. A pesar de la distorsión de las anatomías que presentan todos los personajes, propio de la época, el artista ha conseguido captar un gran dinamismo en la pieza que es otorgado por la armonización de una estructura compositiva clara. Iconográficamente se trata de un tema enormemente dramático, pero no narrativo, pensado para incitar al fiel a conmoverse ante el sufrimiento físico de Cristo y a admirar su aceptación ante las desgracias que ha de sufrir para redimir a la humanidad.
Por su estilo se puede atribuir esta obra a Juan de Ancheta, escultor barroco perteneciente a la Escuela Romanista, corriente del manierismo español que muestra una marcada influencia de los autores italianos que trabajaron en Roma, especialmente Rafael y Miguel Ángel. El estilo romanista se caracteriza especialmente por su monumentalidad y sus potentes anatomías, rasgos que se aprecian con claridad en esta talla. De hecho, Juan de Ancheta se formó con probabilidad en Italia, dado que su estilo delata influencias de maestros italianos, aunque no hay documentación que apoye este viaje. Hacia 1565 Ancheta se encontraba en Valladolid, pero poco después estaba en Briviesca, presumiblemente colaborando con Gaspar Becerra en un retablo para la iglesia del convento de Santa Clara. De hecho, el estilo de Ancheta muestra la influencia del manierismo de Becerra, enriquecido con el clasicismo de la escultura romana contemporánea. Se cree que el escultor volvió a trabajar junto a Becerra hacia 1558, en un retablo.