Pedestal del siglo XVI y cruz del siglo XVIII.
Piedra tallada.
Pedestal adaptado a la talla de la cruz.
Medidas: 94 x 45 x 31 cm.
Cruz que se sustenta sobre una base de piedra que por su estructura parece ser una base de una de una columna, de hecho en la zona superior se puede apreciar la basa de la columna original. En cuanto al diseño de la base este se encuentra adorando con relieves de carácter figurativo. En el frente la talla presenta a un caballero montado sobre su caballo, que posee una postura en cabriolé, aportando así un gran dinamismo a la concepción de la talla. En cuanto a la representación del caballero, cabe destacar que durante el renacimiento se rescataron estas figuras medievales otorgándoles un gran prestigio que cristalizo en el Príncipe de Maquiavelo La zona trasera del basamento también posee ornamentación, en este caso un cuarto creciente y varas estrellas talladas de manera esquemática.
La cruz renacentista que se dispone sobre la base posee un acabado técnico más pulido, de líneas más suaves y depuradas. La pieza también posee tallas en las dos caras, siendo la de mayor relevancia, aquella que posee la crucifixión de Cristo. La crucifixión de Jesús ha sido representada en el arte religioso desde el siglo IV. Es uno de los temas más recurrentes en el arte cristiano y el de una iconografía más evidente. Si bien se representa a veces a Cristo vestido, lo habitual es representar su cuerpo desnudo, aunque con los genitales cubiertos con un paño de pureza (perizonium). El acabado de la talla nos presenta una figura de Jesús de rotundas formas anatómicas, con las costillas marcadas y la tensión reflejada en las articulaciones de los brazos. La zona trasera posee una imagen religiosa de un religioso ataviado con gorro y portando en una de sus manos un manojo de trigo, por lo que seguramente se trate de la representación de San Juan de Colonia.