Escuela francesa; siglo XIX.
“Carlos IV de Borbón”.
Bronce.
Fundición a escala del siglo XIX, a partir del Bronce del arquitecto y escultor Manuel Tolsá (Villa de Elguera, Valencia 1757- Ciudad de México 1816).
Medidas: 49 x 54 x 19 cm.
Esta escultura ecuestre en bronce representa al monarca Carlos IV ataviado con el atuendo idealizado de un emperador romano, evocando la iconografía clásica del poder y la autoridad imperial. El rey aparece montado sobre un caballo en movimiento, cuya postura dinámica aporta una sensación de fuerza contenida y majestuosa, resaltando la figura del soberano como símbolo de dominio y estabilidad.
La obra original fue realizada por el escultor y arquitecto español Manuel Tolsá a finales del siglo XVIII, y constituye una de las piezas más representativas del arte neoclásico en América. Actualmente, la escultura original se encuentra emplazada en la Plaza Manuel Tolsá, en el Centro Histórico de la Ciudad de México, frente al Museo Nacional de Arte. Su estilo y proporciones demuestran el dominio técnico del artista, así como la influencia de la tradición escultórica europea aplicada al contexto virreinal novohispano.
Más que una simple imagen conmemorativa, esta escultura encarna una visión idealizada del poder monárquico, trasladando al ámbito público una narrativa visual de legitimidad, grandeza y continuidad con la herencia del Imperio romano, muy en consonancia con los ideales ilustrados de la época.