FRANS JOCHEMS (Amberes, Bélgica, 1880–1949)
“Mono”
Bronce patinado.
Firmado.
Con sello de fundición belga “Schielynck Brongiet Herbutt”.
Medidas: 31 × 20 × 20,5 cm.
El escultor Frans Jochems, reconocido por su destacada habilidad en la representación del mundo animal, demuestra en esta obra su refinada capacidad para captar la actitud natural y la expresividad de las criaturas. La escultura representa a un mono sentado sobre sus nalgas, con el cuerpo ligeramente ladeado, en una postura que transmite curiosidad y atención, como si el animal observara algo en el suelo con lo que está a punto de interactuar.
Frans Paul Jochems mostró interés por las artes plásticas desde muy joven. Sólo tenía doce años cuando fue aprendiz del litógrafo Julien in 't Feld y recibió clases en el Instituto Saint-Lucas de Amberes. Su talento no tardó en manifestarse y tuvo la oportunidad de estudiar en la Academia de Amberes y en el Instituto Superior de Bellas Artes. Allí fue alumno de Thomas Vinçotte. También trabajó en el taller de Frans Joris, Josué Dupon y Frans Deckers. Poco después de terminar sus estudios, Frans Jochems obtuvo los premios Van Lerius y De Keyser. Recibió numerosos encargos de organismos públicos y particulares. Realizó viajes de estudios a París, Alemania y Londres donde trabajó durante un tiempo. Su apogeo fue desde 1918 hasta el comienzo de la gran crisis de los años treinta. De hecho, a partir de entonces comenzó una época difícil para muchos artistas que duraría hasta el final de la Segunda Guerra Mundial, en 1945. Fue miembro de varios círculos artísticos, como Ken U zelf, Wij, Kring der Antwerpse kunsthouwers, y más tarde Pictura, VBKB (Asociación de Artistas Profesionales de Bélgica) y Ronde Tafel. Participó en numerosas exposiciones. En 1925, el Ministerio de Asuntos Exteriores le concedió la distinción honorífica de Caballero de la Orden de la Corona por el conjunto de su obra.
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