Muñeca; finales del siglo XIX.
Cuerpo de porcelana y tela.
Precisa limpieza.
Posee marcas en la nuca.
Medidas: 37 x 25 x 30 cm (sentada).
Muñeca con cabeza, brazos y piernas de porcelana y ojos de vidrio de estilo decimonónico. Vestida con traje rosa con lazos y blonda, mejillas sonrosadas, boca entre abierta con dientes. Hasta mediados del siglo XIX, las muñecas reproducían a mujeres adultas; en torno a 1850 aparecen las primeras con forma de niña o bebé, y para finales de la centuria este nuevo tipo dominará ya el mercado. Realizadas en composición, porcelana, papel maché y otros materiales, las nuevas muñecas serán piezas de delicada manufactura, cuidadosamente policromadas, trabajadas buscando el realismo. De ahí que se incorporen detalles como los ojos móviles, las pelucas, las distintas expresiones, etc.