Pipa de tabaco, vástago y boquilla, Centroeuropa, c.1850.
Espuma de mar “Meerschaum”, plata punzonada, vidrio, piedras semipreciosas, madera y hueso.
Presenta punzones de localidad y artífice.
Medidas: 7,5 x 10 x 4 cm; 32,5 cm.
Pipa para fumar tabaco del siglo XIX. La pieza conserva vástago y boquilla. En cuanto a la cazoleta, esta destaca por la ornamentación de piedras semipreciosas, dejando entrever una clara influencia estilística de carácter otomano.
Las pipas, en particular, han sido consideradas verdaderas piezas de arte y testimonio material de épocas y estilos. Elaboradas en diversos materiales como madera, arcilla, espuma de mar o incluso metales preciosos, muchas de ellas reflejan la estética, la tecnología y los valores de las sociedades que las produjeron. Su manufactura cuidadosa y diseño ornamental convirtieron a algunas en objetos de lujo, dignos de ser coleccionados y conservados.
Hoy en día, más allá del debate en torno al consumo de tabaco y sus efectos, las pipas representan un campo de interés para coleccionistas, antropólogos y museólogos. Su valor reside no solo en su rareza o antigüedad, sino en lo que revelan sobre las prácticas cotidianas, la evolución del diseño industrial y la historia del consumo. Así, estos objetos trascienden su función original para convertirse en portadores de memoria cultural.