Escuela española del siglo XVII.
“San Antonio y el Niño Jesús”.
Óleo sobre lienzo. Reentelado.
Precisa restauración.
Medidas: 81 x 61 cm.
En esta escena religiosa se representa el tema de la aparición del Niño Jesús a San Antonio de Padua. Frente al santo, arrodillado y vestido con hábito, vemos al Niño Jesús sentado sobre un libro abierto. San Antonio de Padua o de Lisboa (Lisboa, ca. 1191 a 1195 – Padua, 1231) fue un fraile franciscano, predicador y teólogo, venerado por sus milagros y como santo y Doctor de la Iglesia, que fue primero miembro de la Orden de canónigos regulares de San Agustín, hasta que se hizo franciscano en 1220. San Antonio de Padua es, después de San Francisco de Asís, el más popular de los santos franciscanos. Es representado como un joven imberbe con amplia tonsura monacal, vestido con hábito, y suele aparecer con el Niño Jesús, sosteniéndolo en brazos, en alusión a una aparición que tuvo en su celda. Se convirtió en el atributo más popular de este santo a partir del siglo XVI, siendo especialmente popular en el arte barroco de la Contrarreforma.