Escuela holandesa del siglo XVII-XVIII.
“El incendio”.
Óleo sobre lienzo.
Medidas: 33 x 19 cm.
La pintura en licitación aúna magistralmente el paisaje holandés con el sentimiento romántico. El artista muestra un paisaje de atenuadas luces, con un campo agreste interrumpido por las llamas de un incendio cuyo foco de origen queda oculto a nuestros ojos. El ominoso cielo acoge las humaredas negras que se disipan entre las nubes del atardecer. Junto al desastre natural que acontece, las construcciones de una población holandesa se mantienen resistentes.
El paisaje romántico tuvo dos vertientes principales: la dramática, de vistas turbulentas y fantásticas, y la naturalista, que enfatizaba imágenes de una naturaleza apacible y serena. Esta primera concepción es la que vemos plasmada en esta obra; el pintor trata de comunicar una reverencia religiosa por el paisaje, la naturaleza en plenitud, con pocos elementos industriales de la vida moderna. De hecho, el propio uso que ha hecho aquí el autor de la luz transmite una atmósfera que de ensueño, que invita al espectador a meditar y a contemplarse a sí mismo en el paisaje. Encontramos en esta obra un contenido netamente poético, que va más allá de la simple representación del natural para plasmar la naturaleza como un reflejo del sentimiento del autor.