JOSÉ DE IBARRA (Nueva Galicia, Guadalajara, 1685-México, 1756).
“San José con el Niño”.
Óleo sobre cobre.
Firmado.
Presenta faltas.
Medidas: 39 x 25 cm; 52 x 36 x 3 cm (marco).
Como observamos en la obra en licitación, José de Ibarra fue un innovador en la pintura novohispana, buscando transmitir las emociones y los afectos de manera efectiva. Nos brinda una imagen de gran virtuosismo en su ejecución, en la que San José mira hacia el Niño, a quien sostiene entre sus brazos. Jesús, por su parte, responde a la mirada de su padre con admiración y respeto, dispuesto a prestarle toda su atención, toda su voluntad y secundarle en su actitud, y recoge con su mano derecha un ramo de lirios blancos, atributo en la representación de San José. Padre e hijo se ven rodeados por un elenco de puttis. El colorido es suave y amable, y coincide con el espíritu de la pintura novohispana de del siglo XVII. Hasta la Contrarreforma, lo más común era que la figura de San José permaneciera en un segundo plano, dado que no se le otorgaba ninguna importancia teológica. Sin embargo, a partir de Trento se recuperará su papel protagonista como protector de Jesús durante su infancia, como guía durante sus años de juventud, y como tal se representa aquí. Frente a la ternura, indefensión y candidez de la figura infantil, San José se presenta como un personaje monumental, típicamente barroco, impresión que queda reforzada por la composición piramidal. Mediante esta forma de representación, el autor realza visualmente el papel decisivo como protector del padre putativo de Jesús.
José de Ibarra fue uno novohispanos más destacados del siglo XVIII. Fue discípulo de Juan Correa y trabajó con los hermanos Nicolás y Juan Rodríguez Juárez, quienes promovían una academia de pintura. Presidió una academia independiente de pintores en la capital del virreinato, donde se utilizaron las teorías y modelos de Charles Le Brun para renovar la pintura. Su trabajo influyó en importantes clientes, como las catedrales de México y Puebla, y se convirtió en un referente para la pintura en Nueva España. Sus obras se pueden apreciar en diversas colecciones y museos, como el Museo Amparo.