Escuela flamenca; segundo tercio del siglo XVIII.
“Virgen desamparados o Alegoría de la caridad”.
Óleo sobre cobre.
Medidas: 16 x 13 cm; 25 x 18,5 cm (marco).
La presencia de una mujer coronada portando una flecha, que bajo su manto acoge a varios niños, evidencia la representación de la caridad como concepto. Sin embargo, también se puede tratar de la representación de la Virgen de los desamparados.
Nuestra Señora de los Inocentes, Mártires y Desamparados, coronada canónicamente en 1921, se encuentra en la Basílica de la Virgen de los Desamparados de la ciudad, y se la muestra con una característica inclinación, una azucena en una mano y el Niño Jesús, quien lleva, a su vez, la Cruz.
La influencia barroca del siglo XVII es aún patente tanto en la iconografía como en ciertos detalles de la obra, aunque también es posible percibir el ligero cambio que supuso la llegada del Neoclasicismo desde el siglo XVIII.