Atribuido a GASPARD DUGHET (Roma, 1615-1675)
"Paisaje con figuras".
Óleo sobre lienzo.
Presenta dos etiquetas al dorso: "italian landscape, Gaspar Poussin", "bought at Christie's, June 27, 1889".
Medidas: 35 x 45 cm.; 54 x 65 cm.(marco).

Este paisaje lacustre representa con maestría el ideal clásico del paisaje barroco, en el que la naturaleza se convierte en un escenario armónico y solemne para la presencia humana.

En la composición, un río o lago tranquilo surca el paisaje boscoso, reflejando sutilmente la luz dorada del atardecer que baña toda la escena con tonos cálidos y terrosos. A la orilla, tres figuras de aspecto clásico o bíblico (quizá profetas) aportan una nota narrativa y espiritual, integrándose de manera natural en el entorno.

El paisaje se desarrolla en suaves planos sucesivos: árboles de copa densa en primer término, casas dispersas sobre una ladera en la zona media, y al fondo, unas montañas azuladas y vaporosas que cierran la perspectiva con un sentido poético de lejanía.

Dughet, conocido también como Gaspard Poussin por su relación artística con su cuñado Nicolas Poussin, manifiesta aquí su estilo característico: composición ordenada, equilibrio entre naturaleza y arquitectura, y una atmósfera serena donde la luz del crepúsculo otorga al conjunto un tono de melancolía clásica y armonía idealizada.

Gaspard Dughet es considerado como uno de los principales maestros en la creación de la poética del paisaje romano del siglo XVII, además de ser uno de los artistas más valorados de su tiempo y, además de trabajar el lienzo, realizó al fresco numerosas decoraciones en palacios romanos. Especializado en los paisajes, gustó sobre todo de mostrar el entorno de Roma. Los expertos coinciden en destacar que la relativa abundancia de obra conservada, unida a la falta de fechas, hacen difícil una cronología y un estudio detallado de su producción. Estilísticamente, partió de un paisaje en el que destacaba la serenidad clásica (por influencia de Poussin), para ir adaptando la influencia de pintores nórdicos para aportar mayor dramatismo a su trabajo, añadiendo tormentas o paisajes escarpados. Las pequeñas figuras humanas de sus pinturas fueron realizadas a veces por otros artistas. Es preciso destacar que fue nombrado Académico de San Lucas en Roma en 1659, y que el embajador español Castel Rodrigo compró mucha obra suya, que podía ser para sí mismo o para el rey Felipe IV. Su trabajo se conserva en diversas colecciones privadas de todo el mundo y en instituciones como el Museo del Prado de Madrid, el Museo del Hermitage de San Petersburgo, la Dulwich Picture Gallery de Londres, la Wallace Collection de Londres, la Art Gallery of South Australia, el Museo de Bellas Artes de Budapest, etc.