Escuela española del siglo XIX.
“Los apóstoles dormidos en el huerto de los olivos”.
Óleo sobre tabla.
Presenta restauraciones y repintes.
Medidas: 26 x 38 cm; 49 x 61 cm (marco).
Esta pintura devocional representa a los discípulos Pedro, Juan y Santiago durmiendo en el huerto de los olivos, junto a la figura de Cristo (que no aparece en la escena). Los evangelios narran que, angustiado por una extraña tristeza, Jesús acudió a orar al monte de los Olivos, hacia donde le siguieron los apóstoles. Una vez allí, Jesús se retira a un lado para rezar, haciéndosele presente el momento de la crucifixión. Así, este episodio da inicio a la Pasión cruenta en el alma de Cristo. Los apóstoles caen en un profundo sueño, y un ángel se aparece a Jesús para confortarle. De hecho, este episodio alude a la más grande de las tentaciones de la vida de Jesús, la última de todas: conociendo su destino, puede huir de sus enemigos o seguir cumpliendo con su misión divina, arriesgando su vida. (Mateo: cap. 26 v. 37; Marcos: cap. 14 v. 33).