FERNANDO DE AMÁRICA (Vitoria, 1866 – 1956).
"Orillas de un bosque en el Zadorra cerca de Criptana", 1926.
Óleo sobre tabla.
Firmado en el ángulo inferior, fechado y dedicado al dorso.
Medidas: 35 x 23,5 cm.; 46 x 36,5 cm.(marco).
Fernando de Amárica inmortaliza aquí un rincón boscoso y fluvial cercano al pueblo de Criptana. Pintor vasco, Fernando de Amárica inició su formación en su adolescencia, en las clases de dibujo de la Escuela de Artes y Oficios de Vitoria, si bien no será hasta finalizar sus estudios de Derecho, que cursó en Valladolid, cuando decida dedicarse plenamente a la pintura, a la edad de veintidós años. Algunos años después, en 1895, realizará un viaje a Roma, donde acude a dibujar al Círculo de Bellas Artes. A su regreso se instala en Madrid (1898), y allí ampliará su formación plástica en el taller de Joaquín Sorolla, para poco después iniciar su carrera artística profesional participando en 1899 en la Exposición Nacional de Bellas Artes, presentando los lienzos “La Vega de Güell en Abril” y “Tarde de septiembre a orillas del Zadorra (traspuntes)”. Amárica se especializó en los paisajes y jardines a partir de 1900, a raíz de un viaje a París, donde pudo conocer a Sisley y Monet y participó en el Salón de 1903 y 1905. Algo más tarde, en 1908, participará de nuevo en una muestra oficial parisina, en este caso en el Salón de la Sociedad Nacional de Bellas Artes. Ya completamente establecido, en las décadas siguientes celebrará importantes exposiciones de su obra en Madrid y Barcelona, participa en colectivas también en el extranjero y realiza nuevos viajes a París. Asimismo, Fernando de Amárica fue maestro de otros pintores vascos como Ricardo Sacristán Arrieta. Actualmente está representado en el Museo del Prado, los de Bellas Artes de Bilbao, San Sebastián y Álava y la Fundación que lleva su nombre en Vitoria, así como en otras colecciones públicas y privadas.