FEDERICO MOLINA ALBERO (Barcelona, 1905 – Bunyola, Mallorca, 1981).
“Retrato”.
Óleo sobre lienzo.
Firmado.
Medidas: 90 x 72 cm; 110 x 92 cm (marco).
Federico Molina Albero se dedicó preferentemente a la pintura de bodegones y a la figura femenina. En esta ocasión el artista muestra a una mujer que adopta una postura sentada, si bien se representa la práctica totalidad de su cuerpo. Ataviada con vistosos ropajes, destaca la vasija que porta, en la que el artista hace gala de su capacidad artística, configurando una pieza llena de brillos en la que incluso se aprecia el torneado del barro. A pesar de que el artista no realiza un rostro completamente definido, se intuye una mujer hermosa, con rasgos fuertes, de mirada expresiva, cabellos oscuros y tez morena. La mujer se sitúa frente a un fondo neutro, en tonos verdosos, realizado con pinceladas espontáneas que crean una superficie vibrante. En las ropas el pintor ha empleado pinceladas largas y expresivas, en las que demuestra gran habilidad en el uso del color. En los rostros el pintor trabaja de manera más minuciosa, sin renunciar por ello a la expresividad y soltura de su pincelada.