Atribuido a Leonardo Alenza

Atribuido a LEONARDO ALENZA Y NIETO (Madrid, 1807 – 1845).
“Cuaderno de dibujo”.
Conjunto de 16 dibujos grafito sobre papel.
Uno de ellos es un dibujo a lápiz de color rojo.
Procedencia: Félix Boix.
Medidas: 14,5 x 21,5 x 1,5 cm (Álbum).
álbum de dibujo que alberga dieciséis dibujos que reúnen algunos paisajes, un estudio de la cabeza de un bebe y en su mayoría escenas costumbristas y populares. Dicha temática sumada a la técnica del artista, la composición y la presencia de arquetipos cotidianos invitan a pensar en la obra de Leonardo Alenza.
Leonardo Alenza capturó en sus dibujos y acuarelas con aguda sensibilidad el Madrid que le fue contemporáneo. A través de sus obras se revelan paisajes urbanos y escenas que probablemente observaba en sus recorridos, que él mismo describía como "cacerías", por los barrios populares o las riberas del río. No faltan tampoco en sus composiciones los personajes típicos del costumbrismo madrileño: figuras populares, trabajadores, delincuentes y gentes del común que, con toda seguridad, veía a diario en los alrededores de su vivienda, en la plaza de San Ildefonso, la Corredera y otras zonas céntricas. Alenza plasmó así una galería viva de tipos sociales, oficios modestos y escenas cotidianas que retratan tanto las costumbres como los riesgos de la vida en la capital del siglo XIX.
Leonardo Alenza inicia su formación aprendiendo dibujo con Juan Antonio Ribera, y asistiendo a las clases de colorido y composición que impartía José de Madrazo en la Real Academia de San Fernando. En 1842 es nombrado académico de mérito de San Fernando. Su especialidad fueron obras costumbristas de pequeño formato, así como en retratos llenos de vida en los que supo dotar a sus modelos de expresividad y profundidad psicológica. Sus óleos se caracterizan por una factura suelta, a base de manchas, así como por su magistral manejo de la luz y su dominio del color. En su paleta dominan, como aquí vemos, los tonos pardos y apagados, herencia del Goya más sobrio, el de las “Pinturas negras”, al que también se aproxima en la temática elegida en muchas de sus obras, de la que el óleo que aquí comentamos es un elocuente ejemplo. De hecho, Aureliano de Beruete le consideraba el más importante de los pintores influidos por Goya. Leonardo Alenza está ampliamente representado en el Museo del Prado, y tiene obras además en los Museos Romántico y Municipal de Madrid, la Biblioteca Nacional, el Lázaro Galdiano y el Marqués de Cerralbo.