Aert van der Neer

AERT VAN DER NEER (Gorcum, 1603 - Amsterdam 1677)
"Paisaje invernal".
Óleo sobre tabla.
Firmado en el ángulo inferior izquierdo.
Con etiqueta en el reverso.
Medidas: 27 x 45,5 cm.; 39 x 57 x 3,5 cm.(marco).

Este paisaje invernal se inscribe con notable claridad en el corpus más característico del maestro neerlandés Aert van der Neer, célebre por sus escenas nocturnas, crepusculares y paisajes invernales, en los que conjuga un profundo sentido atmosférico con una mirada intimista sobre la vida cotidiana en los Países Bajos del siglo XVII. En esta obra, Van der Neer despliega una composición panorámica horizontal que se articula en profundidad mediante un camino nevado y serpenteante que guía la mirada desde el primer plano (dominado por una fortificación que recuerda a un castillo con torreones y tejados piramidales) hacia un horizonte en el que se insinúan suaves valles, casas de arquitectura tradicional y árboles desnudos. Este recurso del camino sinuoso es característico de su manera de estructurar el espacio, dotando al paisaje de un ritmo visual pausado y narrativo. El hielo, elemento recurrente en su obra, se convierte aquí en escenario de vida comunitaria: figuras minúsculas patinan, pasean, arrastran barriles en trineos o caminan con pastones, captadas con una gestualidad contenida, especialmente en las piernas, que se balancean sobre los patines. Van der Neer insinúa el movimiento con precisión observacional. La paleta, limitada a tonos terrosos, blancos y negros, da lugar a una atmósfera fría y tenue, matizada por una luz difusa, sin contrastes dramáticos, lo que acentúa la serenidad general de la escena. El blanco de la nieve se integra suavemente con los marrones del terreno y la arquitectura, logrando un efecto de unidad tonal que se inscribe en su preferencia por la monocromía armónica.

Este tipo de obras forma parte de lo que podría considerarse el núcleo estilístico de Van der Neer, quien, aunque no alcanzó en vida el reconocimiento de contemporáneos como Jacob van Ruisdael o Aelbert Cuyp, sí desarrolló un lenguaje propio, centrado en la poética del hielo, la niebla y el crepúsculo. Este paisaje, en particular, representa no solo una escena estacional, sino también una crónica visual de la vida bajo el clima septentrional, donde el invierno se convierte en espacio de encuentro, juego y supervivencia.

Aert van der Neer fue un pintor paisajista de la Edad de Oro neerlandesa. Como paisajista, se especializó en dos temas principalmente: escenas nocturnas con luz de luna, de las cuales es el maestro más reconocido entre los pintores holandeses; y paisajes invernales con patinadores, campo en el que es un exponente de primera fila. Se tiene conocimiento de Aertvan der Neer por primera vez en Gorcum, en el sur de Holanda, donde trabajó según su biógrafo ArnoldHoubraken, como administradorde los señores de Arkel cerca de Dordrecht. En 1630 se mudó a Amsterdam, donde se dedicaría a la pintura, y donde nació su hijo, el pintor de retratos y figuras, Eglon Hendrick van der Neer. Neer empezó su carrera como pintor al cumplir los 20 años, concretamente tras conocer a los hermanos Rafael y JochemGoyertsz. Sus primeras obras se comprenden dentro de la pintura de genero acercándose al estilo de Pieter Quast. Aunque, Van der Neer apenas consiguió vivir de su arte ni ser valorado en su época, actualmente destaca entre los pintores holandeses, gracias a sus escenas de luz de lunas y paisajes invernales. Su pintura tuvo una clara influencia de los pintores de la escuela Frankenthal como Alexander Keirincx, Gillisz de Hondecoeter y RoelandSavery. Esta tendencia es perceptible gracias a la colocación de figuras aisladas, ríos helados y la costumbre de cerrar con árboles los laterales de sus composiciones, remetiéndonos a las obras d Pieter Brueghel el Viejo.