Manolo González

MANOLO GONZÁLEZ (Las Palmas de Gran Canaria, 1965).
“Torso I, Restos clásicos”, 2010.
Bronce con patina ocre. Ejemplar 2/5.
Adjunta certificado de autenticidad expedido por el artista.
Firmada y justificada.
Medidas: 35 x 13 x 10 cm.
Manolo González inició su trayectoria artística bajo la tutela del fotógrafo Fachico Rojas y su esposa Luisa Hernández, quienes ejercen una influencia decisiva en su formación inicial. En 1984 comienza los estudios de Bellas Artes en la Universidad Central de Barcelona, formación que abandona prematuramente para desarrollar una carrera autodidacta, sustentada en el estudio atento de los grandes referentes de la escultura universal, desde las manifestaciones prehistóricas hasta las corrientes contemporáneas.
Su incursión en el circuito expositivo tiene lugar a una edad temprana, en 1982, cuando apenas contaba con diecisiete años. No obstante, es con Hedoné (1995), primera obra realizada en malla metálica y presentada en el CIC de Las Palmas de Gran Canaria y posteriormente en el Espacio Guimerá de Santa Cruz de Tenerife (1996), cuando se consolida como una figura destacada dentro del panorama escultórico del archipiélago. A partir de 1998 colabora de forma continuada con la galería Saro León, vínculo que le permite proyectar su obra en contextos internacionales como ARCO Madrid, la VII Bienal de La Habana (2000), el Museo de Arte Contemporáneo de Oaxaca (2004), Art Basel Miami Beach (2007), ARTMadrid (2011), JustMadrid (2012) y KIAF Seúl (2012), en asociación con Bom Gallery.
Su obra forma parte de instituciones como la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, la Fundación Mapfre-Guanarteme, el CAAM, el Museo de Escultura de Leganés, la Real Academia Canaria de Bellas Artes, además de estar presente en espacios públicos de diversos municipios de Gran Canaria, Tenerife y Alcalá de Henares, así como en numerosas colecciones privadas.
En 2009 fue galardonado con la Medalla de Plata Lorenzo il Magnifico en la VII Bienal Internacional de Arte Contemporáneo de Florencia, por su obra PROMETEO – La Autocreación. En 2013 fue nombrado académico de número en la sección de escultura de la Real Academia Canaria de Bellas Artes de San Miguel Arcángel, donde pronunció su discurso de ingreso titulado La experiencia estética, una vía hacia el conocimiento. En 2014, el Cabildo Insular de Gran Canaria le concedió el Can de Plata a las Artes, en reconocimiento a su significativa contribución al embellecimiento y enriquecimiento del espacio público de la isla.