Eugenio Granell

EUGENIO GRANELL (A Coruña, 1912 – Madrid, 2001).
“Detrás de la Esfinge”, 1959.
Óleo sobre lienzo.
Firmado y fechado en el ángulo inferior derecho. Titulado y fechado al dorso.
Medidas: 51 x 76 cm; 64 x 88 cm (marco).
En esta pintura, realizada en 1959, Eugenio Fernández Granell se encuentra en un momento de plena madurez creativa, ya instalado en Nueva York y firmemente comprometido con el lenguaje surrealista. La obra parece sumergir al espectador en un universo casi submarino, poblado de corales, formas orgánicas y estructuras en constante metamorfosis, donde el color y la textura construyen un espacio vivo, palpitante y ambiguo. El título introduce una clara dimensión alegórica y simbólica. En este contexto, la esfinge adquiere una relevancia fundamental: figura ancestral asociada al enigma, al conocimiento oculto y a la resistencia del pensamiento frente al poder, se convierte en una metáfora del propio Granell. Exiliado, perseguido ideológicamente y marcado por una vida de desplazamientos forzados, el artista proyecta en esta imagen su reflexión sobre la identidad, la memoria y el misterio de la historia. En estos años, Granell integra de manera natural las influencias del Caribe y América Latina, territorios donde vivió durante la década anterior. La exuberancia cromática, las formas biomórficas y ciertas resonancias del arte indígena dialogan con el surrealismo europeo, especialmente con los paisajes musgosos y los bosques encantados de Max Ernst, en los que la naturaleza parece esconder una vida secreta. Todo ello se funde en una abstracción orgánica que no es decorativa, sino profundamente conceptual.
La pintura de 1959 refleja así el cruce de caminos vital e intelectual del artista: el exilio político, la libertad creativa del surrealismo y una visión crítica del mundo contemporáneo. Granell convierte la imagen en un espacio de resistencia poética, donde mito, naturaleza y pensamiento se entrelazan
Eugenio Fernández Granell fue un artista y escritor surrealista profundamente marcado por el exilio y el compromiso político. Nacido y criado en Santiago de Compostela, inició su formación en la música antes de trasladarse a Madrid, donde se vinculó a los círculos marxistas y al POUM. Tras combatir en el bando republicano durante la Guerra Civil, se vio obligado a exiliarse . En 1985 regresó a España, ya reconocido internacionalmente, recibiendo importantes premios y consolidándose su legado con la creación de la Fundación Eugenio Granell en Santiago de Compostela.