Fritz Reusing

FRITZ REUSING (Alemania, 1874-1956).
"Autorretrato", 1905.
Óleo sobre tela.
Firmado y fechado en el ángulo inferior izquierdo.
Presenta un parche en el reverso.

En este autorretrato, Fritz Reusing se pinta ante lo que imaginamos un cuadro terminado. del gran lienzo solo vemos el soporte, y ante él su autor, que nos mira mientras sostiene un cigarrillo en su mano derecha. Cabe presumir que el pintor no ha querido caracterizarse como un pintor bohemio sino como un elegante personaje enfundado en traje elegante, con cuello almidonado y corbata. Con ello nos da a entender el elevado nivel de su clientela, que efectivamente pertenecían a la alta burguesía y la nobleza: desde el famoso científico Albert Einstein hasta los káiseres alemanes y los líderes del ejército. El pincel de Reusing era hábil a la hora de evocar el carácter de cada modelo. Era elogiado por su pincelada vivaz; cada trazo sobre el lienzo insuflaba carisma al sujeto. Ello también queda patente en los autorretratos, de vívida e inquisitiva mirada.

Reusing se formó en la Academia de Arte de Düsseldorf y siguió la larga estela artística dejada por sus predecesores en una de las instituciones artísticas más prestigiosas de Alemania. La Escuela de Düsseldorf era conocida por sus pinturas románticas y llenas de vida. Por otra parte, la habilidad de Reusing atraía a un gran número de clientes. En la pintura de retratos, en particular, su estilo romántico pero naturalista era sumamente popular. Las tradiciones de la Escuela de Düsseldorf se mantenían con férrea determinación, y Reusing era su mayor defensor en el campo del retrato.

Sus retratos de líderes militares, en particular, están impregnados de un fuerte sentido del valor y la vanagloria. Su intención era representar a los modelos con la mayor pompa posible, pintados durante los tiempos de guerra de principios del siglo XX. El pincel de Reusing podía adaptarse a cualquier modelo en cualquier contexto y producir una obra basada en el realismo, pero impregnada del romanticismo justo para enfatizar el espíritu de sus modelos.

Estos esfuerzos le valieron a Reusing un gran reconocimiento. Expuso ampliamente y ganó medallas en exposiciones internacionales, como la celebrada en Múnich en 1901. De hecho, su pasión dio sus frutos y es totalmente evidente en las numerosas sociedades y asociaciones artísticas a las que se afilió, especialmente en Düsseldorf. A pesar de que su carrera le llevó por todo el mundo, Reusing regresó al lugar donde todo comenzó y se convirtió en una parte activa de la escena artística. La ciudad le recompensó con creces, y su legado va más allá de sus pinturas. Una calle de la localidad de Haan, a las afueras de Düsseldorf, lleva su nombre.

Nacido en Mülheim, en 1897 se convirtió en miembro de la Asociación de Artistas Malkasten. En 1901 fue galardonado con medalla de oro en la Exposición Internacional de Arte de Múnich. En 1911 expuso en la Gran Exposición de Arte de Berlín. En 1918 fue nombrado miembro honorario de la Academia de Arte de Düsseldorf.