Henri Lerolle

HENRI LEROLLE (París, 3 de octubre de 1848 - París, 22 de abril de 1929)
“Mandame Lerolle en el interior de casa”.
Óleo sobre lienzo.
Presenta etiqueta informativa de antigua exposición al dorso.
Medidas: 61,5 x 60,5 cm; 78 x 67,5 cm (marco).
En esta pintura Henry Lerolle retrata a su esposa en el interior del hogar, absorta en la sencilla tarea de doblar la ropa. Se trata de un instante íntimo, casi furtivo, de la vida cotidiana, transformado por la mirada del pintor en una escena de serena trascendencia. El cajón de la cómoda abierto, las telas dispersas en el suelo y la figura concentrada en su labor componen un cuadro de gran naturalidad, donde la rutina doméstica se convierte en motivo artístico.
En la monografía Henry Lerolle (París, 1848–1929), publicada por Ed.wapica y la Société des Amis d’Henry Lerolle dentro de la colección Cultura Memoria, se recogen varias obras en las que el artista aborda este mismo tema desde diferentes perspectivas. Todas ellas remiten a un universo familiar reconocible: el del apartamento de la avenida Duquesne, un interior refinado pero sobrio.
La composición remite inevitablemente a la tradición de la pintura costumbrista holandesa. Como en las escenas de Vermeer, la protagonista aparece interiorizada, ensimismada en su labor manual, mientras la luz del día penetra por la ventana y una puerta abierta hacia otra estancia amplía la profundidad del espacio. Lerolle, sin embargo, no se inscribe en el impresionismo de sus contemporáneos, sino en un naturalismo que privilegia la claridad de la forma y la atmósfera sobria.
Tras formarse en la Academia de Charles Suisse y en la Escuela de Bellas Artes de París, bajo la tutela de Louis Lamothe, debutó en el Salón de 1868 y expuso regularmente en la Sociedad Nacional de Bellas Artes, donde obtuvo múltiples distinciones, incluida una medalla de oro en 1900. Si en sus primeras obras predominan las escenas al aire libre, hacia la década de 1890 Lerolle dirige su atención a un registro más íntimo: interiores y retratos, en los que con frecuencia aparecen su esposa Madeleine Escudier o sus hijas Yvonne y Christine, como en la pintura aquí analizada.
Figura central de la vida artística parisina, Lerolle se rodeó de pintores, músicos y escritores. Coleccionó obras de Degas, Monet, Renoir, Maurice Denis y Gustave Moreau; fue violinista y compositor aficionado, y gracias a su esposa se introdujo en la música contemporánea, entablando amistad con Claude Debussy, Henri Dupuis, Serguéi Prokófiev, Maurice Ravel e Igor Stravinski. Sus hijas, a su vez, se casaron con los hijos del industrial y coleccionista Henri Rouart, y posaron para Degas, Renoir, Denis y Besnard, testimonio de la red de vínculos que unía al pintor con la vanguardia artística.
Además de la pintura de género y el retrato, Lerolle cultivó la decoración mural, a menudo con inspiración religiosa. En 1874 ejecutó El bautismo de los mártires de Créteil para la iglesia de Saint-Christophe, y en el Salón de 1878 presentó La comunión de los apóstoles, un monumental encargo de la ciudad de París para Saint-François-Xavier.