Bargueño castellano del s. XVII.

Bargueño castellano del siglo XVII.
En madera de nogal, con marquetería en boj, ébano y maderas frutales.
Medidas: 51 x 106 x 42 cm. (arquilla); 88,5 x 89 x 44 cm.(patas); 140 x 106 x 44 cm.(total)

Esta es una soberbia arquilla o escritorio con su soporte original tipo "pie de puente". Se trata de un mueble emblemático del mobiliario español, específicamente de la escuela castellana del siglo XVII. El cofre rectangular en madera de nogal exhibe un exterior sobrio, con herrajes forjados y tiradores de hierro. La tapa abatible, al abrirse, hace las veces de escritorio y muestra un frontal de bargueño decorado con fina marquetería en cada uno de sus cajones a modo de puntas de diamante y demás diseños geométricos en boj, maderas claras y ebonizadas. Los tiradores tienen forma de venera. La parte central, finamente tallada y revestida de pan de oro, está concebida como una fachada arquitectónica. Una hornacina, a modo de sagrario, acoge la efigie escultórica de un eclesiástico con hábito y mitra episcopal. Debajo de la hornacina, dos pequeñas puertas doradas y finamente talladas, con columnillas y motivos vegetales, ocultan compartimentos secretos, destinados a los objetos más valiosos. Este elemento central demuestra la maestría del artesano, al tiempo que subraya la importancia de la piedad y la fe en la vida cotidiana del siglo XVII español.

El escritorio descansa sobre una mesa de nogal macizo, robusta y elegantemente tallada, conocida como "pie de puente" por el travesaño que une las patas. Las patas son torneadas y están rematadas en la parte superior con capiteles tallados con motivos vegetales. El elemento más característico es el travesaño inferior, tallado en forma de arquería, que confiere estabilidad y una gran elegancia estructural al conjunto.

Este tipo de bargueños eran un símbolo de estatus y riqueza, destinado a guardar documentos importantes, joyas y objetos de valor.