Escuela veneciana, ca. 1350.

Escuela veneciana, ca. 1350.
Círculo de LORENZO VENEZIANO (1336-1379)
"Coronación de la Virgen".
Témpera y pan de oro sobre madera.
Medidas: 31 x 35 x 3,5 cm.

Importante obra, atribuible al entorno de Lorenzo Veneziano, que representa una exquisita interpretación de la Coronación de la Virgen. Pertenece al marco estético de la escuela veneciana tardogótica. Se trata de una témpera sobre tabla enriquecida con pan de oro, técnica característica del arte italo-bizantino, aún vigente en Venecia en esa época, aunque ya matizada por los incipientes influjos del gótico internacional. La composición presenta a la Virgen María y a Cristo sentados sobre un banco marmóreo, apenas discernible debido a la intensa radiación simbólica del fondo dorado, que anula cualquier profundidad espacial en favor de un plano sagrado, atemporal y celestial. Esta fusión del trono con el oro no es fortuita, sino que actúa como estrategia visual para integrar las figuras en una jerarquía espiritual idealizada, en consonancia con la teología visual del Trecento.

Cristo aparece caracterizado con el cabello dorado, vestido con una túnica carmesí con ricos bordados en el cuello. Coloca con manos de dedos afilados la corona sobre la cabeza de María, cuya reacción es de una gracia contenida y reverente. Los dedos largos y los gestos sutiles, así como la elongación de cuellos y torsos, responde a una estilización típicamente gótica, donde la espiritualidad se manifiesta a través de la esbeltez corporal.

Ambos personajes presentan rostros suaves y ojos almendrados de iris marcados, recurso derivado aún del mundo bizantino pero reinterpretado ya en clave emocional, con un lirismo que prefigura la suavización expresiva del gótico veneciano. Los pies desnudos, detalle inusual pero teológicamente cargado, enfatizan su humanidad y la humildad intrínseca al acto divino de coronación.

Este panel, por su formato y dimensiones pudo haber formado parte de un políptico devocional o un retablo desmembrado, quizás un compartimento superior o lateral de una predela. La estructura cerrada, simétrica y frontal del conjunto, junto con el empleo intensivo de pan de oro y la falta de perspectiva arquitectónica, lo sitúan dentro de la estética bizantino-gótica aún dominante en Venecia hacia la mitad del siglo XIV.

Su proximidad estilística con Lorenzo Veneziano (activo entre 1356 y 1372) resulta evidente en el tratamiento de los rostros, el diseño de los paños con plegados lineales, y la introducción de detalles más humanizados dentro de un canon todavía jerárquico. Lorenzo fue un precursor fundamental en el tránsito de la pintura veneciana desde los cánones rígidos de la tradición oriental a una mayor delicadeza gótica y expresividad narrativa, influido tanto por el Trecento toscano como por las tendencias corteses del gótico internacional.