Mariano Rodríguez

MARIANO RODRÍGUEZ (La Habana, Cuba, 1912-1990).
Sin título, serie “Los Hombres y las plantas vigilan”, ca. 1963.
Óleo sobre lienzo.
Inventario: P.91.153 (Museo Nacional de Bellas Artes de Cuba).
Exposiciones:
-«Oleos y dibujos del 63», Galería La Habana, Cuba, 20 de septiembre - 13 de
octubre de 1963.
-«Mariano. Obras escogidas», Museo Nacional, La Habana, julio de 1991,
reproducida en color en la página 58 del catálogo.
Bibliografía: Catálogo razonado, «Mariano, Pintura, dibujo y cerámica
1950-1966, Volumen II», bajo la dirección de José Veigas Zamora, ediciones
Vanguardia Cabana, 2008, reproducida en color con el n.º 63.09, p. 300.
Se entregará al comprador un certificado de autenticidad de Dolores y Alejandro
Rodríguez, con el número 698, con fecha del 31 de marzo de 2007.
Medidas: 99,5 x 79 cm.

Esta pintura constituye una obra paradigmática dentro de su período de transición entre la figuración expresionista y la abstracción simbólica. En ella, Mariano Rodríguez condensa con economía de medios y fuerza plástica una visión intensa del ser humano en comunión, o en vigilancia mutua, con el mundo natural. Se trata de un lienzo de potente lirismo cromático y marcada carga simbólica, en el que la figura humana emerge con una presencia enigmática y resuelta, a pesar de su síntesis formal extrema.

El hombre representado aparece delineado con pocos trazos sintéticos. Su postura frontal transmite una actitud de presencia espectral, de vigilancia, en consonancia con el título de la serie. Es un centinela, conciencia latente.

Pintor autodidacta, Mariano Rodríguez se inició a muy pronta edad en el mundo del arte. En 1930 inicia su carrera artística para, en el año 1936, viajar a México, lugar donde se impregnará de sus primeras influencias artísticas. Rodríguez comienza a utilizar entonces colores que recordaban el ambiente tropical: verde, color tierra y ocres con los que definía figuras con fuertes rasgos, pareciendo extenderse más allá del límite bidimensional del cuadro. Ya en la década de los 40, empezó un periodo expresionista, inspirándose sobre todo de Picasso y de Matisse. Fue en aquella época, a partir de 1941, que comenzó su serie de “gallos”. También dedicó otras series en torno a campesinos, mujeres, paisajes y naturaleza muerta. Más tarde, mostró otro giro en su carrera artística, empleando colores más oscuros y alejándose de la figuración. Entre 1962 y 1963, relató a través de sus pinturas, la historia contemporánea de Cuba, particularmente la Revolución. Sus temas son variados, pero su obra muestra una predilección por el universo femenino, con una fuerte connotación sexual. Mariano Rodríguez falleció en 1990 en La Habana.