Antonio Peyro y Cerámica Carrecio

ANTONIO PEYRO (Castellón 1881-1954) y Cerámica CARRECIO; Sevilla, 1950.
Loza esmaltada y vidriada.
Firmadas en la base.
Medidas: 15,5 x 22 x 12,5 cm (mayor); 14 x 13 x 8 cm (menor).
Conjunto formado por tres esculturas de animales. Antonio Peyró Mezquita fue pintor, escultor, ceramista y orfebre. Nacido en Onda (Castellón) en 1881. Comenzó trabajando en la fragua de su padre cuando tan solo era un niño, fue su primer acercamiento al fuego de la fragua. Tras su paso por la fragua, entró como aprendiz en el taller del maestro Viciano, coincidiendo con el escultor Francisco Paredes. Con catorce años Peyró fue becado para estudiar en la Academia de Bellas Artes de San Carlos (Valencia). En 1926 marchó a Madrid para continuar sus estudios en la Academia de San Fernando, se encontró con profesores como Emilio Sala y Muñoz Degrain. Se interesó por la pintura, la cerámica, diseño, escultura y orfebrería; gracias a su diversidad de temas, su dinamismo y fantasía lo situaron entre los pintores castellonenses más importantes de su generación. Sus obras más destacadas se encuentra su serie de grandes grupas, como: “Valencianos a caballo en día de gala”. Gracias a los trabajos artísticos de Peyró acabó descubriendo para el arte las típicas cerámicas castellonenses. Entre su producción destacan las figurillas de cerámica, especialmente las dedicadas a reflejar a figura femenina valenciana, como, por ejemplo: "Valencianas", "Juegos Florales" y "Danza Valenciana". Las figuras estaban terminadas a la perfección, las formas eran macizas y simplificadas. Las obras de Peyró tuvieron gran aceptación en su tiempo, tal fue el éxito que abrió dos casas de venta de las figuras en Valencia y Madrid. Fue catedrático en la Escuela de Cerámica de Madrid, ciudad en la que vivió gran parte de su vida. Murió en Valencia en 1954.