DESCRIPCIÓN
VICENTE MACIP (Valencia, hacia 1555-1623).
“La Adoración del Niño”, c. 1510-1525
Óleo sobre tabla.
Adjunta informe de expertizaje expedido por Don Alberto Velasco.
Presenta restauraciones en la superficie pictórica.
Medidas: 89,5 x 65 cm; 121 x 94 cm (marco).
Siguiendo las palabras del experto Don Alberto Velasco “Nos hallamos ante una obra inédita que supone una aportación importante al catálogo de pinturas de Vicente Macip, el antiguo Maestro de Cabanyes, uno de los introductores dellenguaje renacentista en tierras valencianas. La obra, de gran efectismo gracias al tratamiento perspectivo, la riqueza de los detalles y al diseño parcialmente clasicista de las arquitecturas, entronca perfectamente con lo conocido del maestro valenciano y nos emplaza ante el resultado de una significativa unión de la tradición flamenca con las novedades italianizantes que a principios del siglo XVI cuajaban en los reinos hispanos.Los protagonistas del episodio aparecen representados en primer término, con María y José arrodillados adorando al Niño. Otro de los protagonistas del episodio es Dios Padre, que aparece efigiado de busto en la zona superior rodeado de nubes festoneadas de notable carga atmosférica. La imagen del Todopoderoso enfatiza lo trascendente de un episodio que transcurre en el mundo de los humanos, el nacimiento y advenimiento de su Hijo. En cuanto a los tres pastores, uno de ellos ha penetrado en el espacio donde se halla Jesús y se ha prostrado de rodillas también. Viste como tal y cubre su cabeza con un turbante, mientras aguanta con sus manos un cordero. Los otros dos pastores aparecen algo separados de la acción, en el exterior, parapetados detrás de un antepecho. Uno de los aspectos más significativos es la hibridación que se da entre las columnas cuadradas decoradas con motivos a candelieri y las bóvedas de crucería que las rematan, lo que nos habla de este lenguaje de transición y de cómo las novedades se adaptaban a la tradición existente. Iconográficamente, uno de los aspectos que más llama la atención, y que incluso podría considerarse una rareza, es la presencia de san Juanito en primer término recibiendo un protagonismo notable al ubicársele en el eje central de la composición”.
Vicente Macip Comes, pintor renacentista también conocido como “Vicente Joanes” e hijo del pintor Joan de Joanes, también conocido como Juan de Juanes. Al parecer, la única obra documentada del maestro es el retablo de la iglesia parroquial de Bocairente, que su padre contrató en 1578 y que no pudo terminar por fallecer un año después, siendo, por tanto, su hijo el que se ocupó de terminarlo pero manteniendo todavía la colaboración con su padre, lo que dificulta a los expertos el ver la mano propia del hijo.