Taller de Louis de Caullery, s. XVII

Escuela de Amberes de la primera mitad del siglo XVII.
Taller de LOUIS DE CAULLERY (Caullery, ca. 1580- Amberes, 1621).
“Calvario”.
Óleo sobre tabla.
Engatillada.
Medidas: 68,5 x 95 cm; 82,5 x 110 cm (marco).

La escena que mostramos está concebida como una imponente escenografía teatral, siguiendo de cerca los modelos instaurados por el pintor Louis de Caullery. Es una obra perteneciente al círculo de este pintor flamenco, una obra de taller. Las concomitancias se aprecian parangonando, por ejemplo, esta pintura con la "La Crucifixión" de Caullery conservada en el Museo del Prado. El ambiente fastuoso que componen los múltiples personajes, su tratamiento cortesano, el brillante colorido y los expresivos movimientos zigzagueantes de los crucificados (el cuerpo de Cristo y de los ladrones) es muy similar en ambos cuadros. Los contraluces son sublimes, así como el bosque de lanzas de los soldados que apuntalan el cielo y los toques de color en las zonas iluminadas (los yelmos argénteos, la pelambre de los caballos...) deudores de la escuela veneciana. Un rompimiento de gloria de color ambarino lanza destellos naranjas sobre las multitudes. Los personajes han sido trabajados en dos planos: individualmente en indumentarias y gestos, pero también en conjunto, con la intención de denotar un efecto multitudinario. En definitiva, es una pintura digna del taller de Caullery, que logra subyugarnos por su fuerza dramática.

Louis de Caullery fue un pintor de origen francés que en 1594 comenzó su formación artística en Caullery como aprendiz de Joos de Momper en el gremio de San Lucas, en el que se inscribió como maestro en el curso 1602/1603. A pesar de su formación al lado de Momper, la obra de Caulery, se encuentra más cercana a la sofisticación manierista que al naturalismo barroco. Recibiendo una clara influencia de alguno de los grabados de Hans Vredeman de Vries, principalmente, de quien tomó los caprichosos fondos arquitectónicos. Su obra también muestra características similares a la pintura del artista Frans Francken II, las cuales se puede apreciar especialmente en el tratamiento anatómico de las figuras, aunque en Caulery etas, siempre son representadas como una estética volumétrica y masiva, tanto en las escenas cortesanas, como en las alegóricas, que forman la parte más interesante de su producción. Respecto a las escenas religiosas, realizó una gran producción encabezadas estas por el motivo del Calvario, el cual repitió en numerosas ocasiones.