Atribuido a Jacopo Amigoni

Atribuido a JACOPO AMIGONI (Venecia, 1680/1682 - Madrid, 1752).
“Marqués de la Ensenada”.
Óleo sobre lienzo.
Presenta perforación.
Conserva marco de época.
Medidas. 83 x 67 cm; 87 x 81 cm (marco).
Esta obra sigue los modelos del retrato del Marqués de la Ensenada pintado por Jacopo Amigoni, c. 1750, que actualmente forma parte de la colección del Museo del Prado de Madrid. Aunque en este caso concreto el protagonista aparece inscrito en un fondo neutro que aporta protagonismo único a la figura del marqués. De este retrato se realizaron numerosas versiones como la que se encunetra en el Musey Nacional d´Art de Catalunya. Zenón de Somodevilla y Bengoechea, I Marqués de Ensenada (Alesanco, cerca de Logroño - 1781), comúnmente conocido como el Marqués de Ensenada, fue un estadista español. Desempeñó un papel clave en la elaboración y aplicación de la Gran Redada Gitana, conocida oficialmente como el Encarcelamiento General de los Gitanos, que fue un intento de exterminar a los gitanos que vivían en España, lo que provocó la muerte de 12.000 gitanos.
Jacopo Amigoni, también llamado Giacomo Amiconi, fue un pintor italiano de finales del Barroco o del Rococó, que comenzó su carrera en Venecia, pero viajó y fue prolífico por toda Europa, donde sus suntuosos retratos fueron muy solicitados. Al principio, Amigoni pintaba escenas mitológicas y religiosas; pero a medida que la panoplia de sus mecenas se ampliaba hacia el norte, comenzó a producir muchas obras de salón que representaban a dioses en sensual languidez o juegos. Su estilo influyó en Giuseppe Nogari. Entre sus discípulos se encuentran Charles Joseph Flipart, Michelangelo Morlaiter, Pietro Antonio Novelli, Joseph Wagner y Antonio Zucchi. A partir de 1717, se le documenta trabajando en Baviera, en el castillo de Nymphenburg. Regresó a Venecia en 1726. Su Arrebato de París se conserva en la Villa Pisani de Stra. De 1730 a 1739 trabajó en Inglaterra, en Pown House, Moor Park Wolterton Hall y en el teatro de Covent Garden. Desde allí, ayudó a convencer a Canaletto para que viajara a Inglaterra hablándole del amplio mecenazgo disponible. En 1747 marchó de Italia a Madrid, animado por Farinelli, que tenía allí un nombramiento en la corte. Llegó a ser pintor de corte de Fernando VI de España y director de la Real Academia de San Fernando.